DOMINGO VOLVIÓ AL COLÓN,
CANTÓ CON EL CORO Y BESÓ EL ESCENARIO.




UNO MÁS. DOMINGO ES EL TERCERO DESDE LA IZQUIERDA EN LA SEGUNDA FILA DEL CORO, CON LOS TENORES.

Por Daniel Fernández Quinti

En una visita para homenajear a los trabajadores, Plácido Domingo volvió ayer al Colón. Dirigió, cantó con el Coro Estable y hasta se arrodilló y besó el escenario para prometer: “Nos vamos a ver pronto”.
Fue una visita corta, una fiesta entrañablemente emocionante para un poco más de 500 personas, trabajadores junto a sus familiares que se habían avisado por mail y SMS. Es que tal como informó Clarín , el martes el tenor había estado en el Teatro, charló con la gente y “quería cantar para los trabajadores”, contaron anoche. Y les dio lo que mejor sabe hacer a integrantes del ballet, de las áreas escenotécnicas y de la administración. Faltaron, según pudo reconstruir Clarín , músicos de las orquestas, uno de los sectores que está en medio de un conflicto gremial con el Gobierno porteño.
Tras ensayar en la 9 de Julio, Domingo llegó a las 18.40 al Colón, subió por la escalera de la calle Libertad y fue derecho a la sala principal. La gente, que lo esperaba sentada, se sorprendió al verlo entrar por el pasillo principal. Estaba también el director del Teatro, Pedro Pablo García Caffi y el del Coro, Peter Burian. Y habló desde el escenario: “Estoy muy feliz de estar acá, y deseo poder volver el año que viene a cantar en el Teatro (cuando cumpla 40 años de su debut en el escenario del Colón)”. A las nueve de la noche volvió a recordarlo en el multitudinario concierto del Obelisco, con un escenario orientado hacia el Teatro.
Luego vino un pequeño ensayo.

EN EL TEATRO. UNOS MINUTOS ANTES DE PONERSE A CANTAR OCUPO EL ROL DE DIRECTOR JUNTO AL MAESTRO MARCELO AYUB, EN EL PIANO.


Domingo dirigió al coro desde el podio del director y así sonaron el “Va, pensiero” de la ópera Nabucco, y fragmentos de la Marcha Triunfal de Aída, ambas de Verdi. Entre aplausos, la gente no lo podía creer. Pero había más. Domingo volvió al escenario y le preguntó al Coro: “¿Dónde están los tenores?”. “Cuando él decide ir a cantar con el coro, el coro le hace un hueco en el medio y él pregunta dónde está su cuerda y se integra con los tenores como si fuera uno más”, contó Juan Martín Collado, el Jefe de Contratos.
Así, lo inimaginable. Domingo cantó con ellos el “Va, pensiero”. Luego vinieron besos y abrazos, y el tenor se arrodilló en el escenario, lo besó, y dijo: “Nos vamos a ver pronto”. Luego saludó y se fue por el mismo pasillo alfombrado que recibe en cada función a todos los plateístas.


Fuente: clarín.com



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